Algunos de los retos a los que se han enfrentado en los mercados Norteamericanos con la inclusión de fuentes de generación eléctrica eólica y solar consiste en la incertidumbre y la variabilidad que presentan estas fuentes y, por tanto, han evidenciado la necesidad de diferentes estrategias para aumentar la flexibilidad operacional de los sistemas. Además, con el fin de compensar los menores ingresos para los generadores, derivados de los menores precios de estas fuentes y para los distribuidores dada la mayor generación distribuida, han explorado la necesidad de pagos por capacidad u obligaciones de energía firme y los pagos por provisión de servicios auxiliares para garantizar la estabilidad dinámica de sistema, en el primer caso, y en el segundo, han explorado cómo garantizar la co-existencia de los sistemas de generación centralizada de gran escala con los sistemas distribuidos. Asimismo, en PJM la participación de los consumidores, por medio de la respuesta de la demanda, en el mercado de capacidad, quizás es uno de los más desarrollados a nivel mundial. Así el objetivo de este artículo es describir los cambios que se han dado en Estados Unidos específicamente en PJM para incentivar la generación renovable y la eficiencia energética, garantizando la confiabilidad del sistema.