En este documento se estima un modelo econométrico que descompone la serie de inflación trimestral anualizada entre un componente transitorio y otro permanente, este último inducido probablemente por las variaciones en la meta del Banco Central. Se concluye que la persistencia inflacionaria se elevó en Colombia entre 1979-1989 y 1989-1999, y se redujo a sus menores niveles en 1999-2010, gracias a la adopción del régimen de inflación objetivo. También se concluye que la brecha de la inflación presenta baja persistencia, un resultado consistente con la Curva de Phillips Neo-Keynesiana. La parte final del documento evalúa la persistencia de los diferentes componentes de la inflación utilizados por el Banco de la República en sus pronósticos.