Este trabajo explora la evolución estructural del PIB agropecuario en Colombia desde finales de los sesenta hasta el 2007. Como fuentes de crecimiento se tienen en cuenta la productividad y las áreas cosechadas. Se encuentra que en los últimos 16 años el área cosechada ha disminuido alrededor de un 25%, mientras que la productividad se ha mantenido generalmente estancada. Se concluye que el sector agrícola, debido a diferentes medidas de protección y soporte sectorial, a lo largo de décadas, no ha logrado integrarse plenamente a un mercado competitivo. Además, se presenta un ejercicio comparativo con Chile, México y Brasil. Éste sugiere que la manera más eficiente para incorporar el sector agrícola a la dinámica del resto de la economía es mediante la provisión de incentivos económicos que induzcan a mejoras efectivas de productividad. La revisión de la información sobre inversión, tanto doméstica como extranjera, sugiere que en Colombia esta no ha sido suficiente para impulsar cambios estructurales en el sector.