Se utiliza información de precios a nivel de producto-establecimiento entre 1999 y 2008, en frecuencia mensual, para estimar el efecto que tienen los aumentos en el salario mínimo en los precios de la comida fuera del hogar y algunos de sus componentes como almuerzos, hamburguesas, comidas rápidas calientes y gastos en cafetería. El enfoque sigue la línea de Aaronson, French y MacDonald (2006) y MacDonald y Aaronson (2005) quienes estudiaron el efecto de los cambios del salario mínimo en el precio de la comida fuera del hogar en Estados Unidos. La evidencia, para Colombia, sugiere que un aumento de 10% en el salario mínimo produce un aumento contemporáneo de 1,33% en el precio de la comida fuera del hogar y de 3,07% si se consideran anticipos y rezagos. Este resultado no parece sugerir la existencia de fuertes rigideces de precios en este mercado. Del hecho que los aumentos en el salario mínimo se reflejen en incrementos de precio de la comida fuera del hogar se puede conjeturar que las firmas dedicadas a la producción y venta de ésta no tienen poder de monopsonio en el mercado de trabajo. Por el contrario, aumentos en el salario mínimo producen reducciones en el empleo, lo cual es compatible con un mercado de trabajo competitivo.