La literatura económica establece que la depreciación de la tasa de cambio favorece la competitividad de un país al disminuir no sólo los precios relativos de la producción nacional con respecto al resto del mundo sino también al reducir el precio de insumos productivos como el trabajo. De acuerdo con lo anterior, un aumento generalizado de la tasa de cambio o una depreciación debería, ceteris paribus, aumentar los niveles de ocupación del país. Para el caso colombiano, poco se sabe del efecto causal de la depreciación real en la generación de empleo. En este documento se explora el efecto que las variaciones de la tasa de cambio real tienen en la variación de la ocupación industrial para las trece principales ciudades. Para lograr lo anterior, hacemos uso de la composición industrial de cada ciudad y de sus niveles de interacción con el resto del mundo con el fin de identificar el grado de exposición a fluctuaciones de la tasa de cambio. Los resultados sugieren que para el caso de la industria manufacturera, transable, una depreciación de la tasa de cambio exportadora del 1% por encima del promedio de la muestra, genera un aumento en el empleo del 0.2%. Dicho efecto no se ve amplificado por una mayor orientación exportadora. De otro lado, una depreciación real de la tasa importadora del 1% por encima del promedio de la muestra, está relacionado con una reducción en el empleo local cercano al 0.4%. Este último resultado sugeriría la existencia de complementariedades entre el empleo local y los insumos extranjeros pues frente al encarecimiento de la producción importada, se reduce no sólo la demanda de importados sino también la del empleo local. En general, la evidencia sugiere que la depreciación real tiene mayores efectos sobre el empleo manufacturero por el encarecimiento de las importaciones que por el efecto de abaratamiento de las exportaciones.