Se usa información de los mercados de Estados Unidos e Inglaterra para hacer estimaciones de la capacidad que tienen la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra de afectar las tasas de interés del mercado. Las estimaciones muestran que las reacciones son mucho menores que las originales de Cook y Hahn (1989). Cuando dicha ecuación se modifica para considerar la paridad cubierta de intereses se verifica por una parte que ésta se cumple y que las autoridades monetarias logran afectar las tasas de interés del mercado. Se encuentra evidencia del cumplimiento de la hipótesis de expectativas de tasas de interés.