Este artículo evalúa uno de los componentes fundamentales de la política más icónica del gobierno de Álvaro Uribe: la Seguridad Democrática. En particular, se evalúa el impacto sobre la intensidad del conflicto armado de los despliegues y refuerzos de policía en municipios con poca o nula presencia policial antes de agosto de 2002. Para ello se utiliza el estimador de diferencia en diferencias, que compara el cambio en la dinámica del conflicto una vez asignados los nuevos efectivos a los municipios receptores, relativo al cambio ocurrido simultáneamente en los municipios no receptores. Nuestros resultados, que son robustos a estimar los modelos sobre una muestra emparejada, sugieren que los ataques de la guerrilla aumentan con los despliegues (instauración de inspecciones de policía en municipios que carecían de estas), y aumentan y luego disminuyen con los refuerzos (envío de nuevos efectivos a municipios con poca presencia policial previa). Estos resultados son consistentes con un modelo sencillo que describe la lucha por el control de territorios valiosos en el contexto de un conflicto armado.