Los países del Este de Asia han invertido más y mejor en la educación que los países de América Latina. Esto ha llevado a mayores tasas de crecimiento y una mejor distribución del ingreso, ya que la distribución de la educación es un determinante primordial de la distribución de los ingresos de trabajo.Parte del éxito de los países del Este Asiático es que concentran su inversión en educación básica. Esto prepara la mano de obra para el entrenamiento en el trabajo, lo cual hace posible adecuar dicha mano de obra al cambio tecnológico.Cada vez más, los trabajadores tienen que adecuar sus conocimientos durante toda la vida profesional, debido a los cambios permanentes en los procesos productivos y en la tecnología; el requisito para hacer esta adecuación fácil es que toda la mano de obra tenga una educación básica.